¿Estás usando bien tu MANO DERECHA? - 4 Ejercicios para tocar como un RAYO
- A. H. Toledo
- 6 jun 2023
- 4 Min. de lectura

Uno de los aspectos más descuidados cuando las personas empiezan a tocar la guitarra es la mano derecha. Recuerdo que cuando yo inicié me enfocaba horas en la mano izquierda, porque claro, me parecía la mano con el trabajo más importante.
Pero poco a poco me fui dando cuenta que la mano derecha es vital, e incluso me atrevería a decir más importante que el de la mano que pisa las cuerdas. Porque esta controla el volumen y la intención de las notas. Es decir, esta es la mano que hace que lo que toquemos suene a música, y solo a sonidos tocados mecánicamente.
Así que si eres como yo y te has olvidado un poco de la mano derecha, o estás en la mitad de tu camino y sientes que hace falta desempolvar esas habilidades, hoy te traigo cuatro ejercicios muy útiles que puedes hacer para desarrollar tu mano derecha mucho más rápido, para que esto no sea un impedimento para tocar más y mejor música.
Ejercicio 1
Te recomiendo que todos los ejercicios que te voy a dar lo realices con la ayuda de un metrónomo. Puedes empezar en un tempo lento (60 bpm es un buen inicio) y después ir subiendo la velocidad conforme vas mejorando.
El primer ejercicio consiste en tocar con la plumilla de manera alternada ocho veces la misma cuerda. Te recomiendo primero hacerlo con las cuerdas al aire. Empieza por la sexta cuerda y toca cuatro notas por cada pulso que marque tu metrónomo. Alternando los movimientos de tu plumilla uno hacia abajo y otro hacia arriba.
Además del ritmo, un punto muy importante al cual ponerle atención es al movimiento de tus dedos al sujetar a la plumilla.
El movimiento de la mano derecha está compuesto por la acción tanto de la muñeca como de los propios dedos que sujetan la plumilla, asegúrate de repartir el trabajo entre estas dos partes. El movimiento que realizan tus dedos es mejor si tiene una acción circular que haga acercarse y alejarse la plumilla de las cuerdas.

Ejercicio 2
Para el siguiente ejercicio trabajaremos el cambio de cuerdas mientras realizamos el plumilleo. En este vamos a tocar cuatro veces al aire la sexta cuerda para después pasar a tocar cuatro veces la quinta cuerda al aire, después la cuarta cuerda, etcétera.
Es importante tener paciencia si al inicio nuestra mano no cae exactamente a la cuerda o a la distancia que le pedimos, ya que está en proceso de acostumbrarse a cómo se sienten estos saltos.
Así que si al inicio no lo logras perfectamente, no te preocupes. Síguelo practicando y eventualmente tu mano interiorizará las distancias y podrá realizar los movimientos sin gran problema

Ejercicio 3
En el próximo ejercicio tenemos más reto. Esta vez intentaremos tocar únicamente dos veces cada cuerda antes de cambiar a la próxima. De manera que tocaremos dos veces la sexta cuerda al aire, dos veces la quinta cuerda al aire, después la cuarta, etcétera.

Ejercicio 4
Para el último ejercicio, intentaremos saltar entre más de una cuerda. Para hacer esto tocaremos la sexta cuerda al aire con un movimiento hacia abajo de la plumilla, después saltaremos a la cuarta cuerda al aire con un movimiento ascendente de la plumilla. Después iremos a la quinta cuerda con movimiento descendente para saltar a la tercera cuerda con un movimiento ascendente. Y así iremos hasta llegar a la primera cuerda.
Una vez ahí, haremos los mismos movimientos en sentido inverso: Primera cuerda, tercera cuerda, segunda cuerda, cuarta cuerda, etc…

Consejos para utilizarlos
Una vez que podemos tocar estos ejercicios sin gran problema en las cuerdas al aire, tenemos tres opciones extras para extender nuestra práctica:
1) Realizarlos haciendo que la mano izquierda pise los primeros trastes de las cuerdas que vamos tocando con la mano derecha.
De manera que el primer ejercicio puede quedar algo como: Pisar los trastes 1,2,3,4 mientras realizamos los cuatro ataques con la mano derecha.
2) Realizar los ejercicios mientras pisamos una posición de acorde abierto con la mano izquierda.
Puede ser un acorde de Mi menor, Sol Mayor, Re Mayor, etcétera. De esta manera nuestros ejercicios sonarán con mayor musicalidad y esto puede motivarnos un poco más a disfrutar el realizar estas tareas.
3) Practicarlos realizando cambios de volumen. Como mencionamos, una de las tareas más importantes de la mano derecha es controlar la interpretación (o el volumen) de tus piezas.
Por lo que puedes sacarle muchísimo mas provecho a los ejercicios - y poner un reto adicional - al cambiar el volumen con el que tocas al ir cambiando de cuerdas. Puedes tocar más fuerte conforme subes de cuerdas e ir disminuyendo el volumen mientras bajas, o tocar una cuerda en volumen alto y la siguiente en volumen bajo. Todo mientras conservas la rítmica y plumilleo adecuados.
Ahí está. Recuerda tomar tiempo de tu práctica para darle a la mano derecha la importancia que se merece y no olvidar practicar sus movimientos todos los días.
MIRA LA EXPLICACIÓN DE ESTE TEMA EN EL VIDEO DE LA SEMANA:
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